jueves, 19 de mayo de 2022

SUGERENCIAS PARA ESTUDIAR MEJOR

 

Comprométase a estudiar

  • 1.       Establezca un horario de estudio. Cuando esté en casa, trate de estudiar mínimo una hora diaria.
  • 2.      Realice las tareas pendientes. Primero haga las más urgentes y después las que tienes para días posteriores.
  • 3.      Repase. Si no tiene tareas, repase las notas o escritos de la última clase. Repase unos 20 minutos por cada materia
  • 4.      Ten un espacio propio para estudiar, que cuente mínimo con una mesa y una silla y con buena iluminación.
  • 5.      A la hora de estudiar, evita las distracciones como el teléfono y la tv.
  • 6.      Todos los implementos de estudio deben estar disponibles como lápiz, lapicero, sacapuntas, borrador, cuadernos, libros, etc.

“La mente es como un paracaídas: solo funciona si se abre”. – Albert Einstein

TIPS PARA APRENDER

1.     Planifica bien tus actividades y se disciplinado

2.     Leer, practicar varias veces ayudan a reforzar el aprendizaje

3.     Distribuye bien el aprendizaje. Es importante estudiar un poco cada día. Concéntrate en una cosa

4.    Ten confianza en que eres capaz y vas a aprender

5.      Duerme bien, recuerda que mínimo deben ser 8 horas

6.      Toma nota en clase y escribe lo que aprendes.

7.      Enseñar a otras personas ayuda a reforzar lo aprendido.

 

Elaborado: Héctor Arley Mejía Gil. Docente Orientador

                                                                                    


jueves, 28 de abril de 2022

LA AUTORIDAD CON LOS ADOLESCENTES

 Algunos de nuestros  adolescentes presentan dificultades en el seguimiento de las normas y en aceptar la autoridad, acompañado de una falta de respeto a  los docentes, padres de familia y todo lo que representa autoridad.

Algunas de las causas, están relacionadas con el poco o nulo acompañamiento de los padres y madres a sus hijos en la crianza en el hogar. Además, que los padres tienen baja capacidad y pocos conocimientos para impartir una autoridad adecuada, que permita un aprendizaje adecuado de las normas, del seguimiento de instrucciones y la forma en que dan las órdenes.  Algunos padres han delegado la crianza y la autoridad a las instituciones como los centros de desarrollo infantil de los 0 a 5 años y posteriormente a la escuela.  En los tiempos que están en casa, hay caos, porque tratan de imponerse los abuelos, los tíos, los padres, los hermanos mayores y hasta los cuidadores. A esto se le puede sumar,  el ejemplo de los padres, los comentarios de los padres en casa donde desautorizan e incluso tratan mal a los docentes delante de los estudiantes.

Algunas de las consecuencias se evidencian en el comportamiento, en este caso en la escuela, en situaciones como estudiantes que no saben escuchar y prestar atención, no siguen ordenes ni instrucciones, no cumplen con sus obligaciones académicas, no respetan la autoridad de los docentes ni directivos, agresiones constantes entre estudiantes, conductas desadaptativas como consumo de drogas, alcohol, cigarrillo, vocabulario vulgar, conflictividad por todo  y riñas callejeras.

ALGUNAS ORIENTACIONES PARA TENER EN CUENTA CON  LOS HIJOS ADOLESCENTES.

1.       LA EMPATIA HACIA LOS HIJOS.  La empatía por parte de los padres provoca en los hijos efectos importantes como:

Mejor capacidad de autoconocimiento y auto-comprensión de su realidad personal. Toma de conciencia de sus problemas, potencialidades y recursos. Apropiación de su situación y  adquisición de actitud de responsabilidad. Promoción de la auto-confianza a partir de la confianza de los padres. Sentimiento de adhesión y afinidad hacia el padre, madre y el núcleo familiar en general. Mejor participación y colaboración en las actividades familiares. Refuerzo de las actitudes de solidaridad y compañerismo entre los hermanos así como de éstos hacia los padres. Promoción de la empatía hacia sus semejantes, base de los comportamientos altruistas y la solidaridad. Actitud positiva hacia el estudio y el trabajo escolar diario.

2.       ESCUCHAR Y TRANSMITIR COMPRENSIÓN A NUESTROS HIJOS. La comprensión nace necesariamente de la escucha atenta, evitando juicios morales, ideas preconcebidas, consejos o soluciones rápidas y sermones con frases hechas que más que acercarnos nos alejan de nuestros hijos, y les hacen experimentar cierta soledad emocional. Por eso, el primer paso para una adecuada  escucha es desmontar  algunas tendencias fáciles y habituales que desarrollamos en la relación con nuestros hijos: Juicio/moralización: “deberías…” “lo que tienes que hacer es…”. Nos referimos a la tendencia a dar órdenes autoritarias y decisivas sobre lo que el otro es, debe de hacer y no hacer. Si se realizan de manera muy reiterada, y sin haber realizado una escucha previa, genera en quien la recibe la sensación de no haber sido entendido y de tener que cumplir las órdenes de los adultos sin  posibilidad de cuestionarlas. “Lo que tienes que hacer es dejar de distraerte tanto y ponerte a  estudiar” “Deberías ser más responsable”.

Ridiculización, sarcasmo, ironía. El uso de estilos de comunicación que se soportan sobre la base del humor, la ironía, la broma o la socarronería pueden, más allá de la intención inicial de “romper el hielo” o divertir, colocar al joven en un estado de inferioridad, ridículo, incomprensión e  incapacidad de maduración.

“¡Mira qué mayor parece, si hasta se pone zapatos de tacón!”

Etiquetación. Consiste en convertir un comportamiento concreto en un rasgo de personalidad y juzgarlo negativamente. suele generar el rechazo de la persona etiquetada y dificulta la comprensión. Las etiquetas no explican los comportamientos de las personas, sólo generalizan lo que hace la persona. “Eres un vago” “No tienes un mínimo de responsabilidad”. Negativismo:  la tendencia a  captar sólo lo negativo en relación a la capacidad del otro.

“Si sigues así, no lo conseguirás” “No haces nada a derechas”

Momento o lugar inadecuado: En ocasiones empleamos comentarios y observaciones acertadas en cuanto a contenidos, que no lo son en cuanto al momento y lugar en el que son manifestados.

3.       ALGUNAS PILDORITAS MAS… Acompañar  a los hijos en todo momento

4.       Estar pendiente de sus actividades y sus amistades

5.       Hablar sobre temas difíciles como de drogas y sexualidad

6.       Enseñar a los hijos a hacer los diferentes oficios de la casa, independiente de si son hombres o mujeres

7.       No darles todo  lo que ellos piden

8.       No ser alcahuetas ni sobre protectores

9.       Tampoco tiranos ni descuidados

10.   No darles la razón en todo. 

     HECTOR ARLEY MEJIA GIL - Docente Orientador IEMTM

LA AUTORIDAD EN LA FAMILIA

 REFLEXION

Poesía:

Cada noche, a las nueve, oigo la voz de papá:

-Vamos, vamos a la cama que es hora de descansar.

No protesto, aunque quisiera quedarme un ratito más.

Calentito y en pijama qué bien sienta descansar.

Y en lo mejor de mi sueño cuando yo era el rey del mar,

oigo una voz conocida, es la voz de mi mamá:

-Vamos, vamos, venga arriba que es hora de levantar.

(Dori Oliver)

Actualmente, muchos de nuestros  niños y adolescentes presentan dificultades en el seguimiento de las normas y en aceptar la autoridad, acompañado de una falta de respeto a  los docentes, padres de familia y todo lo que representa autoridad.

Algunas de las causas, están relacionadas con el poco o nulo acompañamiento de los padres y madres a sus hijos en la crianza en el hogar. Además, que los padres tienen baja capacidad y pocos conocimientos para impartir una autoridad adecuada, que permita un aprendizaje adecuado de las normas, del seguimiento de instrucciones y la forma en que dan las órdenes.  Algunos padres han delegado la crianza y la autoridad a las instituciones como los centros de desarrollo infantil de los 0 a 5 años y posteriormente a la escuela.  En los tiempos que están en casa, hay caos, porque tratan de imponerse los abuelos, los tíos, los padres, los hermanos mayores y hasta los cuidadores. A esto se le puede sumar,  el ejemplo de los padres, los comentarios de los padres en casa donde desautorizan e incluso tratan mal a los docentes delante de los estudiantes.

Algunas de las consecuencias se evidencian en el comportamiento, en este caso en la escuela, en situaciones como estudiantes que no saben escuchar y prestar atención, no siguen ordenes ni instrucciones, no cumplen con sus obligaciones académicas, no respetan la autoridad de los docentes ni directivos, agresiones constantes entre estudiantes, conductas desadaptativas como consumo de drogas, alcohol, cigarrillo, vocabulario vulgar, conflictividad por todo  y riñas callejeras.

ALGUNAS ORIENTACIONES PARA QUE LOS HIJOS APRENDAN A SEGUIR INSTRUCCIONES Y ACEPTEN LA AUTORIDAD.

1.       COMO DAR ORDENES. Llame a su hijo por su nombre. Procure que lo mire a los ojos y dígale claramente que es lo que Usted quiere que haga.  No de más de una orden a la vez. Sea firme.

2.       PRESENCIA DE UNA FIGURA DE AUTORIDAD. Es fundamental que los padres reconozcan  que ellos tienen la autoridad sobre los hijos. No son las abuelas, ni las tías. Tampoco los hijos mandando a los padres.

3.       ESTABLECER NORMAS CLARAS EN LA CASA. Los hijos deben saber que pueden hacer y que no pueden.  Tratar de que padres (incluso si están separados)  y cuidadores tengan las mismas reglas y se apliquen. No desautorizar.

4.       TODO COMPORTAMIENTO DEBE TENER CONSECUENCIAS. Estas deben ser positivas o negativas dependiendo del comportamiento. Solo las pataletas se deben ignorar.

5.       LAS RUTINAS SON IMPORTANTES. Hay cosas en la vida que debemos hacer nos guste  o no nos guste.  A los hijos es necesarios enseñarles a hacer labores de la casa, deben aprender a ser responsables, como mínimo, de sus cosas personales como ropa, habitación, aseo.

6.       COHERENCIA Y CONSTANCIA EN EL EJERCICIO DE LA AUTORIDAD. El ejemplo es fundamental. Debe haber coherencia entre lo que se dice y lo que se hace. Menos cantaleta y más acción.

7.       FIRMEZA. Si usted dice no, es no. Si Usted dice sí, es sí. No esté cambiando de opinión. Sostenga sus decisiones.

8.       AMOR Y ESCUCHA. La clave para una buena educación es ser firmes en la autoridad pero con mucho amor. Escúchelos para que aprendan a escuchar. Oriente y no grite.

HECTOR ARLEY MEJIA GIL- Docente Orientador IEMTM